El día que Kad, el daddy árabe, le da una cita para que le chupe la polla, Nathan está listo para cualquier cosa con tal de no perder esa oportunidad. Cuando se arrodilla frente a este hombre viril, con una sonrisa en la cara, ves que el tipo está viviendo su mejor momento.
Kad saca su enorme polla, gruesa y llena de venas. Nathan la ha soñado tanto, y ahora finalmente puede saborearla, besarla y metérsela hasta el fondo. Disfruta cada segundo, sintiendo cómo la polla de Kad se pone más dura en su garganta.
Pero Kad no es solo un tipo que se deja hacer. Él toma el control, volviendo loco a Nathan con órdenes bien sucias. Lo convierte en el perfecto vaciador de bolas, el tipo que sabe su lugar y lo disfruta. Nathan es un power bottom, el que aguanta esas pollas XXL y siempre quiere más. Su belleza vuelve locos a los chavales de la calle, que aman cubrirle la cara de semen. ¿Su secreto de belleza? Se aplica la leche de los chavales todos los días, y los resultados son evidentes.
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